TU COWORKING CREATIVO EN POBLENOU

La Clandestina está compuesta por un conjunto de espacios de diferentes características, con un total aproximado de 800 m2.

El Oasis

200 m2 destinados a la realización y desarrollo de nuestra oferta sociocultural. 

Espacio Clandestino

En el Espacio Clandestino se encuentra una cafetería para socios y  nuestro Concept Store, en donde se difunde la obra de creadores de ámbito local.

Wave Space

¿Buscas una comunidad de fotógrafos, diseñadores gráficos, periodistas, marketing y filmakers?

Sabemos lo importante que es la calidad del trabajo cuando se interactúa con profesionales de tu sector, por eso el espacio wave está destinado a estos perfiles profesionales. A parte de un ambiente de buenas vibras encontrarás mucha reciprocidad.

Espacio de 120 m2 enfocado al trabajo compartido para profesionales y emprendedores del ámbito artístico y creativo.

Factory Space

Compartirás espacio con diferentes tipos de proyectos y marcas creativas. Tendrás inspiración cada día a medida que te cruces con estos procesos creativos.

175 m2 divididos en talleres y laboratorio de creación.

El Huasillo

El Huasillo sirve para incrementar la calidad de vida de la población estableciendo una relación entre el ser humano, el medio urbano y el natural a la vez que fomenta la biodiversidad y los hábitats que benefician el equilibrio de los ecosistemas. Es también, un proyecto que está siendo llevado a cabo en un espacio anteriormente abandonado y con un índice de contaminación terrestre considerable, que a través de esta intervención está sufriendo una importante recuperación. 

Proyecto de huerto urbano de 250 mpara uso y aprovechamiento de los socios de la asociación y vecinos del barrio. 

Breve historia de la Fábrica Clausolles, sede de La Clandestina de Poblenou

La compañía Valls, Teixidor, Jordana y Cia. – constituida en abril de 1909 por Camil Valls, Ignasi Teixidor, Eugeni Jordana, Josep Maria Macià y Antoni Novals- compraría al fabricante de estampados de algodón Lluis Pellerin una porción de terreno, lindante con la calle Pere IV, con la finalidad de instalar en el mismo una fábrica de artículos y productos sanitarios. El proyecto de edificación sería firmado por el ingeniero industrial Emili Lluch, y del mismo tan solo han perdurado la chimenea y las naves próximas a la calle Pere IV, en cuyas fachadas, de un cierto aire modernista, lucen aún las cruces médicas que hacían referencia al negocio de la sociedad. La empresa se anunciaba como heredera de la antigua casa J. Clausolles, siendo este dato relevante debido al papel precursor jugado por la familia Clausolles.

En torno a 1913, debido a la pérdida de uno de los socios fundadores, la compañía pasaría a denominarse Valls, Jordana y Cia., y tras la muerte de otro de ellos, Camil Valls, acabaría constituyéndose en enero de 1916 la firma S. A. Clausolles.
Nacida como sucesora de la anterior e impulsada por Eugeni Jordana -quién estaba a cargo de su dirección-, la nueva sociedad disponía de un capital de 2.500.000 pesetas, y al igual que sus predecesoras continuaría reclamándose heredera de la tradición empresarial del apellido Clausolles.

La compra de la fábrica en 1955 por parte de la firma Metales y Plateria Ribera, S.A., significaría el inicio de una nueva etapa para el conjunto fabril y que tendría el carácter de inversión inmobiliaria, destinada a ser explotada en régimen de alquiler. El año de la compra, la firma Pané, S.A., al tiempo que ocupaba las instalaciones, acometería -con el beneplácito de los Ribera- una importante reforma en el recinto mediante la edificación de un nuevo conjunto de naves en el interior del mismo.

En torno a 1960 la propiedad iniciaría un proceso de compartimentación de las instalaciones, pasando a ocupar parte de las mismas la industria textil de Domingo Cantí.
Desde 1967 la firma Helios Tratamientos térmicos, se instalaría en la mayor parte de las nuevas naves, generando su actividad las quejas constantes de los vecinos a causa de la contaminación que habían de soportar.

En los años siguientes las instalaciones acogerían a un buen número de pequeñas empresas con actividades muy diversas. Tras la suspensión de pagos llevada a cabo por Metales y Plateria Ribera a mediados de los años ochenta, el recinto fabril iniciaría un proceso de fuerte deterioro, el cual se agravaría en la década siguiente y que acabaría conllevando el derribo de buena parte de las instalaciones originales de 1909. A inicios del nuevo siglo, la empresa Construcciones Metálicas Tryfyme instalaría allí un taller de carpintería metálica, mantenido activo hasta la liquidación del negocio en el año 2016.

La actual etapa de transformación, en concordancia con lo que ha ido sucediendo con otros recintos fabriles del Poblenou, tiene inicio en 2019 cuando la Asociación Cultural y Creativa La Clandestina de Poblenou comienza a promover, poco a poco, la apertura del espacio a los vecinos, programando actividades culturales, creativas, talleres, mercados y eventos de dinamización sociocultural.

Además el impulso al fomento del emprendimiento pasa a ser una actividad importante para el espacio, a partir de 2020, con la apertura de los espacios de trabajo compartido y la acogida de proyectos tan dispares como creativos e innovadores.

Trabajo de investigación y documentación por Isidoro Cervantes. Material gráfico aportado por Arxiu Històric del Poblenou